Pluralidad bajo la lluvia

En el segundo día de Rock al Parque el agua no se hizo esperar.

Foto: Buque de Papel

Por: Juan Carlos Cotrina Lizarazo , p eriodista Buque de Papel , Bogotá

El segundo día de Rock al Parque 2008 es de no olvidar. Los asistentes al evento gratuito más grande de Latinoamérica quedaron empapados con el torrencial aguacero que cayó sobre la capital.

Imagínense en un sólo sitio a los “rastas”, los metaleros, punkeros, grupos de Misión Bogotá, policías y hasta la seguridad privada del evento, todos escurriendo literalmente sus prendas.

En medio del agite y de la emoción que da cubrir un evento de esta magnitud, me embarqué a conocer un poco más de lo que existe en la famosa “Carpa Distrito Rock”, un espacio dedicado a aquellos que quieren vender, promover, enseñar, lo relacionado con el mercado del rock; sin embargo, la sorpresa fue mayúscula ya que gracias a la lluvia, ésta se convirtió en la mejor alternativa para escampar.

Luego de la sorpresa, la primera pregunta que me hice fue: “¿será que está gente sí me pone cuidado estando tan lavados y muertos del frío?” lo curioso es que apenas lo pensé, unos jóvenes que estaban al lado del Policía, me dijeron: “Una foto, una foto” inmediatamente saque mi cámara y comencé a dar forma a aquellos rostros por los cuales corrían gotas llenas de ansiedad… hasta ellas querían que continuara el evento.

Foto: Buque de Papel

Cristian uno de los chicos comenta: “Uno viene a estos eventos a pasarla bien; yo no estoy de acuerdo con esa gente que viene a trabarse”. Con su cabello mojado, sonriente y algo emocionado sigue diciendo: “Aquí se viene a conocer géneros musicales, uno no saca nada con armar problemas”.

Él, junto con sus amigos, llamados David, Héctor, Simón y Javiera una niña de ojos hermosos y mirada dulce…mmm, ¿Javiera? Si señores, es un niña, comenzaron a divertirse en medio del frio, jugando a las “manitas” sí, el famoso “Me su, me su, me subo a la cama, tiro la maleta, rompo una botella, la, la, la”, que todos recordamos de la infancia; Después partieron nuevamente hacia el escenario plaza para disfrutar de la música.

Luego, me encontré otra vez con las promotoras de UNIFEM “Fondo de Desarrollo de las Naciones Unidas para la Mujer”. Pero además, también me encontré con los representantes del Jardín Botánico, quienes están promoviendo el cuidado de las especies en la capital. Uno de ellos dijo: “La idea es que en este Rock al Parque, le enseñemos a la gente las distintas especies arborícolas que están en la ciudad y cómo es su cuidado”. Además de todo me regaló un libro llamado “Enrique Pérez Arbeláez, Su Vida y Obra”.

En otra parte de la gran Carpa Rock, estaban los señores de “Yimup” una tienda virtual de música independiente, quienes invitan a las distintas bandas a subir su música y si las personas que ingresan a la página la descargan, estos tendrán un porcentaje del 52% en las ganancias.

De un momento a otro, se escuchó de fondo los bajos, baterías y guitarras desde la tarima ubicada en el escenario Plaza. En ese instante, todos, hasta las promotoras de UNIFEM, saltaron charcos para poder escuchar bandas reconocidas en la ciudad como “Odio a Botero”, los mexicanos de Panteón Rococo, o los chilenos de Gondwana, entre otros artistas de la tarde, algo soleada. Luego vino un nuevo aguacero para el cierre, con Babasónicos y los gringos de Black Rebel Motorcycle Club.

La pluralidad y el respeto por los demás en Rock al Parque se vive, de eso no queda la menor duda: punkeros, metaleros, rastas, corrían como una sola masa para disfrutar de lo que más les gusta: la música.

Foto: Buque de Papel